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La Asociación Belga de Operadores de Juegos de Azar (BAGO) expresa su apoyo a la “Ley Van Hecke”, que entró en vigor el 1 de septiembre de 2024 y modifica la Ley belga del Juego de 1999. Aunque la BAGO apoya varias disposiciones de la ley, ha expresado su preocupación por las posibles lagunas e incoherencias.
La BAGO, que representa a los operadores de juego con licencia, aboga desde hace tiempo por elevar la edad mínima a 21 años. Tom De Clercq, presidente de la BAGO, acogió con satisfacción el cambio y declaró: “Llevamos tiempo pidiendo este límite de edad más alto para proteger mejor a los jugadores jóvenes”.
Sin embargo, la asociación expresó su preocupación por el hecho de que los menores de edad puedan seguir accediendo a webs de juego ilegales que no ofrecen ninguna protección al jugador. “Es esencial garantizar que estos jugadores no se vean abocados a plataformas no reguladas, donde las salvaguardas son inexistentes. Debemos centrarnos en atajar el mercado ilegal”, dijo De Clercq.
La BAGO también criticó la exención concedida a la Lotería Nacional en materia de publicidad y restricciones de edad y la cita como una importante incoherencia en la ley. De Clercq señaló estudios que indican que un número significativo de jóvenes participan en juegos de lotería, incluso los menores de 18 años.
“Llama la atención que este límite de edad no se aplique a las tarjetas rasca y gana ni a los juegos de lotería ofrecidos por la Lotería Nacional”, señaló De Clercq. “Esto crea un doble rasero, en el que los jugadores más vulnerables siguen expuestos a actividades de juego. Todos los operadores deberían atenerse a la misma norma”.
La BAGO pide que se revisen las repercusiones generales de la ley en el mercado regulado. La organización subraya la necesidad de vigilar si la nueva normativa canaliza a los jugadores hacia plataformas autorizadas y protegidas o los empuja inadvertidamente a manos de operadores ilegales.
De Clercq concluyó: “El objetivo último debe ser garantizar que todos los jugadores, independientemente de la plataforma de juego que elijan, reciban el mismo nivel de protección y supervisión”.