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A medida que avanza el año fiscal, el sector de las apuestas en Kenia se enfrenta a una disminución prevista de 4.200 millones de chelines en ingresos fiscales. Esta recesión pone de manifiesto un panorama cambiante para una industria que ha logrado prosperar a pesar de las importantes presiones fiscales de los últimos años. La Junta de Control y Licencias de Apuestas (BCLB) ha emitido previsiones que indican que el gobierno espera recaudar 20.000 millones de chelines en impuestos sobre el juego, incluyendo impuestos especiales sobre las apuestas y retenciones en la fuente sobre las apuestas ganadoras. Esta cifra representa una disminución con respecto a los 24.200 millones de chelines recaudados durante el año fiscal que finalizó en junio de 2024.
La reducción prevista de los ingresos fiscales se atribuye principalmente a una notable disminución de la participación en las apuestas. Muchos jugadores parecen estar reduciendo sus gastos, sobre todo tras la decisión del gobierno de aumentar el impuesto especial sobre las apuestas del 12,5 % al 15 %. Este aumento de impuestos ha contribuido a un cambio de opinión entre los apostadores, volviéndolos cada vez más cautelosos con respecto a sus actividades de juego.
“Estamos observando un cambio en el comportamiento del consumidor. Basándonos en los datos más recientes de los operadores autorizados del sector y en las iniciativas integrales y multisectoriales emprendidas por la Junta para proteger a los kenianos y preservar nuestro tejido social”, explicó Jane Makau, presidente de la junta directiva de BCLB, en una declaración oficial. “Se proyecta que el sector genere 20.000 millones de chelines en 2025. Esto incluye impuestos especiales, retenciones en la fuente e impuestos sobre apuestas y juegos de azar. Refleja un crecimiento sólido pero regulado”.
Por cada apuesta ganadora, los jugadores están sujetos a una retención de impuestos del 20 %, lo que significa que por cada 1.000 chelines ganados, 200 chelines se remiten a la Autoridad de Ingresos de Kenia (Kenya Revenue Authority, KRA). La presión del aumento de impuestos podría llevar a los jugadores a reconsiderar sus apuestas, lo que reduciría el rendimiento general de la industria y afectaría la recaudación fiscal. Las altas tasas de desempleo y el aumento del coste de la vida siguen impulsando a muchas personas a recurrir al juego como posible solución a sus problemas financieros. Históricamente, la industria ha prosperado gracias a la esperanza de que las apuestas pudieran proporcionar una solución rápida a los desafíos cotidianos. En los ejercicios fiscales de 2023, KRA recaudó 19.200 millones de chelines y 24.200 millones de chelines en 2024 en impuestos sobre las apuestas, lo que indica el alcance de los ingresos generados por el sector incluso en medio de aumentos de impuestos.
La disminución de los ingresos fiscales por apuestas también se produjo durante un período de rápido crecimiento del número de casas de apuestas con licencia, que ahora asciende a 221, más del doble de las 100 registradas en 2021. Actualmente, las casas de apuestas deben pagar un impuesto del 15 % sobre sus ingresos brutos por juegos de azar, así como un impuesto de sociedades del 30 % sobre las ganancias. Se espera que este régimen fiscal se mantenga, y las casas de apuestas deben presentar sus pagos de impuestos diariamente antes de la 1:00 a. m.
Tras esto, la industria podría enfrentarse próximamente a reformas adicionales. Las empresas de juegos de azar en línea y la lotería nacional podrían verse obligadas a depositar 200 millones de chelines para obtener licencias de operación según la legislación propuesta. Estas propuestas se describen en el Proyecto de Ley de Control del Juego de 2023, que actualmente está a la espera de la firma del presidente William Ruto.
La BCLB se muestra optimista de que la aprobación de este proyecto de ley permitirá una supervisión más estricta del sector del juego en el futuro. El Dr. Makau enfatizó que es necesaria una regulación más estricta para mantener la integridad de la industria y proteger a los kenianos. “Se prevé reforzar la supervisión con la aprobación del Proyecto de Ley de Control del Juego de 2023, que se encuentra en proceso legislativo”, afirmó.
Ante la persistencia de los desafíos económicos, el futuro de los ingresos por apuestas en Kenia sigue siendo incierto. Con la implementación de nuevos cambios regulatorios y el cambio en el comportamiento del consumidor, será fundamental que las partes interesadas se adapten a esta dinámica creciente.