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Dos jugadores de los Yomiuri Giants, Louis Okoye y Daiki Masuda, fueron remitidos a la fiscalía japonesa por la Policía Metropolitana de Tokio por apuestas ilegales en línea. Según un artículo de The Mainichi, se sospecha que los jugadores utilizan plataformas de casinos en línea extranjeras, una práctica prohibida por las leyes japonesas.
Fuentes de investigación informaron que Okoye accedió a casinos en línea operados en el extranjero a través de su teléfono inteligente en dos ocasiones distintas, en julio de 2022 y mayo de 2023, apostando alrededor de 7 millones de yenes (48.223 dólares). Según informes, terminó con una pérdida neta de 4,5 millones de yenes (31.000 dólares). Se alega que Masuda apostó en octubre y noviembre de 2024, apostando aproximadamente 3 millones de yenes (20.667 dólares) y perdiendo 2,3 millones de yenes (15.844 dólares).
Según medios locales, ambos jugadores habrían utilizado plataformas en línea, como Wonder Casino y Konibet, y habrían participado en juegos como el blackjack y el bacará. Luego de un interrogatorio policial al que se sometieron voluntariamente, los jugadores admitieron las acusaciones. Las autoridades remitieron el caso a la fiscalía sin ninguna recomendación sobre si presentar cargos.
Los Yomiuri Giants confirmaron que los jugadores se presentaron en febrero después de que el club animara a cualquier persona involucrada en apuestas en línea a denunciarse. El equipo declaró que ambos atletas expresaron su deseo de admitir las irregularidades antes del inicio de la temporada profesional.
Este asunto forma parte de un patrón más amplio de casos de apuestas en línea que afectan a la Liga Japonesa de Béisbol Profesional (NPB). A principios de este año, la NPB impuso una multa colectiva de 10,2 millones de yenes (70.267 dólares) a 16 jugadores de ocho equipos diferentes por participar en actividades ilegales similares. Si bien no se han encontrado vínculos con las apuestas en partidos de béisbol, los incidentes generaron preocupación sobre la conducta de los jugadores y el conocimiento de los límites legales. La NPB también ha asegurado a los aficionados que la integridad del béisbol permanece intacta, a pesar de que las recientes revelaciones han puesto de relieve los desafíos constantes para garantizar una conducta ética en el deporte.
El mes pasado, el lanzador de los Orix Buffaloes, Taisuke Yamaoka, volvió a entrenar luego de su suspensión por apostar en casinos en línea. Según un informe de medios locales, el Club de la Liga del Pacífico permitió que el jugador de 29 años retomara el entrenamiento después de expresar que estaba arrepentido.
La ley japonesa limita estrictamente los juegos de azar, permitiendo solo modalidades específicas como las carreras de caballos y las loterías gubernamentales. Los juegos de casino en línea, incluso a través de operadores extranjeros, son ilegales. Se pueden emprender acciones legales en un plazo de tres años a partir de la infracción, y las consecuencias pueden incluir multas, suspensiones o incluso la rescisión del contrato por parte de los clubes.