La Asociación Holandesa del Juego Online (NOGA por sus siglas en inglés) expresa su profunda preocupación por la propuesta de aumentar el impuesto sobre el juego del 30,5% al 37,8% por parte de un posible nuevo gobierno de coalición en los Países Bajos. La coalición está formada por el Partido por la Libertad (PVV), el Partido por la Libertad y la Democracia (VVD), el partido Nuevo Contrato Social (NSC) y el Movimiento Campesino-Ciudadano (BBB).
Se prevé que la subida de impuestos propuesta, enmarcada en el «apéndice presupuestario de los acuerdos de coalición», aporte 202 millones de euros anuales adicionales a las arcas del estado. Sin embargo, la NOGA teme que haya perjuicios sociales que ensombrezcan los beneficios económicos.
Peter-Paul de Goeij, director general de NOGA, advierte de que la subida de impuestos podría poner en peligro la viabilidad del mercado legal neerlandés del juego. Goeij señala que la canalización a operadores con licencia ya se está estabilizando, y el aumento de impuestos podría empujar a los consumidores holandeses a proveedores ilegales que no pagan impuestos.
El Consejo Asesor holandés sobre la Carga Reguladora (ATR), un organismo de control independiente, ha cuestionado la necesidad de la legalización nueva propuestas para el juego en línea. Argumentan que los requisitos nuevos podrían representar una carga técnica innecesaria para los operadores.
En abril, una estrecha mayoría de diputados de la Cámara de Representantes neerlandesa votó a favor prohibir las tragaperras en línea y la publicidad de las apuestas en línea. Otras mociones reclaman la obligación de controles de riesgo financiero e identificar el juego. Los votos no garantizan adoptar las medidas, ya que Franc Weerwind, ministro de Protección Jurídica, revisará las propuestas y decidirá si se aprueban.
La subida de impuestos y los cambios normativos propuestos marcan una coyuntura crítica para el sector holandés del juego. Aunque la subida de impuestos podría llenar las arcas del estado, no se pueden ignorar las implicaciones sociales y el impacto en el mercado del juego legal. A medida que evoluciona el panorama del juego neerlandés, las miradas siguen puestas en los movimientos del gobierno de coalición y los efectos a largo plazo tanto en los operadores como en los consumidores.
