La idea de que el continente africano adopte sus propias criptomonedas, sobre todo en forma de stablecoins, se debatió en el evento SiGMA África en Kenia.
Una de las mesas redondas celebradas durante el evento se titulaba: “Pagos móviles vs. pagos cripto, ¿quién gana?”.
En el debate, participaron Harmen Brenninkmeijer, socio gerente de NYCE International Ltd, Jeremiah Msangi, director gerente de Bizin Africa Group, y Piotr Plasecki, miembro del consejo de Revenue Capital LLC.
Msangi explicó que la mayoría de la población de Kenia ya utiliza el dinero móvil, pero cree que pronto se producirá un cambio a las criptomonedas. “Alrededor del 20% de la población las ha utilizado en algún momento. Creo que dentro de 5 años será el 50%”.
En este sentido, Brenninkmeijer se pregunta si África está enseñando al mundo o si el mundo está enseñando a África.
“De momento la tecnología está fuera de África. Pero África adopta las fuentes de capital producidas fuera del continente de forma rápida y eficiente”, afirmó Piotr Plasecki.
“Por ahora, las criptomonedas no son dinero, sino más bien un medio de intercambio. De momento, las transacciones se realizan entre criptopropietarios. Llevará tiempo tener dinero real en el mundo Web3. Para tenerlo como dinero necesitamos tenerlo como medio de pago, no solo como medio de intercambio”, continuó Plasecki.
Msangi se mostró de acuerdo: “Algunos países como Sudáfrica están regulando y utilizando el criptoactivo como activo porque no compite con las monedas reguladas por los bancos centrales nacionales. Creo que cada país tendrá su propia moneda digital”.
Brenninkmeijer lanzó la idea de que África tenga una stablecoin similar a USDT. “Pero, ¿cómo van a regularla los bancos? Puedo verlo a nivel local, pero ¿qué pasa si varios países africanos utilizan una misma moneda?”
“Ya tenemos una moneda única que se utiliza en todo el mundo. Como estas stablecoins. Se puede utilizar para pagar dentro y fuera de África. Actualmente, todas las transacciones en África se realizan en dólares estadounidenses. Tal vez los africanos puedan unirse y seleccionar uno de sus países para que se convierta en una superdivisa y luego tener una moneda digital vinculada a ella”.
Msangi también insistió en que los africanos necesitan estar más informados sobre las criptomonedas y sus diferentes usos.