Osaka acoge a MGM Resorts y Orix como primer casino de Japón
MGM Resorts y Orix Corporation llegan a un acuerdo fundamental con la prefectura y la ciudad de Osaka. El acuerdo contempla el desarrollo del esperado proyecto de casino japonés. El esfuerzo de colaboración, llevado a cabo a través de Osaka IR Corporation, una empresa conjunta de MGM Resorts y Orix Corporation, consolidó los planes para un complejo integrado en la isla de Yumeshima, en Osaka.
Aunque el casino en sí ya había recibido la aprobación, esta reunión se convocó para determinar la ubicación y el plan precisos de la instalación turística integral en la zona de Osaka-Yumeshima. La firma del acuerdo tuvo lugar en el Edificio Gubernamental Sakishima de la Prefectura de Osaka, con la presencia de representantes de todas las partes implicadas.
Entre los firmantes del acuerdo se encontraban Hirofumi Yoshimura, gobernador de la Prefectura de Osaka (a la derecha), Hideyuki Yokoyama, alcalde de la ciudad de Osaka y Bill Hornbuckle, consejero delegado y presidente de MGM Resorts International, (en la izquierda).
Bill Hornbuckle expresó sus sentimientos y afirmó: “Esta es una ocasión trascendental para nuestra empresa, ya que concluimos el proceso de certificación y nos centramos en hacer realidad nuestra visión en colaboración con Orix: construir un complejo integrado de categoría mundial en Osaka. Nuestro compromiso con esta empresa es inquebrantable y estamos impacientes por ofrecer experiencias de juego, entretenimiento, restauración y comercio de primer nivel en Japón y Osaka. Nuestra aspiración es llevar el factor sorpresa característico de MGM de Las Vegas a Osaka y crear un complejo que enorgullezca a la comunidad”.
Encuesta nacional
La zona se conoce como Plan de Desarrollo del Área de Instalaciones Integradas de Complejos Específicos y este recinto es el establecimiento pionero de su clase en el país.
La industria japonesa del juego ha recibido mucha atención últimamente, ya que el país aprobó la legislación hace unos años, pero no dio luz verde a la apertura de su casino inaugural hasta abril.
Se calcula que el proyecto del casino recibirá una inversión de 1,8 billones de yenes (13,5 mil millones de dólares), y que tanto MGM como Orix tendrán una participación del 40%. El 20% restante se repartirá entre empresas locales de Osaka, incluidas las de los sectores ferroviario y eléctrico.
Antecedentes de la decisión histórica
Hace seis meses, SiGMA Noticias informó de que Japón había tomado la histórica decisión de aceptar el primer complejo de casinos de la historia. Estará situado en la isla artificial de Yumeshima, con un hotel y una amplia gama de servicios como restaurantes, instalaciones para conferencias, espacios para exposiciones, tiendas, balnearios, un teatro y locales de ocio. Sin embargo, esta decisión suscitó en su momento una mezcla de expectación y controversia. En el lado positivo, prometía un aumento del gasto turístico, pero surgió la preocupación por la posibilidad de que aumentara la adicción al juego y la delincuencia organizada.
Los grupos de apoyo a los adictos al juego expresaron su “preocupación grave” y citó un aumento de las peticiones de ayuda de jóvenes adictos al juego en línea. Para hacer frente a estas preocupaciones, los ciudadanos japoneses debían pagar una tasa de 6.000 yenes por cada 24 horas pasadas en el casino, y una parte de la tasa se destinaría a combatir la adicción.
El encanto de Japón
En abril de este año, el primer ministro Fumio Kishida anticipó que el complejo estimularía el desarrollo de la región de Osaka en general y serviría como centro turístico para mostrar el encanto de Japón al mundo.
El mercado japonés del juego, estimado en 20 mil millones de dólares anuales, podría experimentar un crecimiento sustancial al construir tres complejos de casinos. Los principales operadores de casinos han hecho presión para que se apruebe el primer complejo y previsto importantes beneficios y mayores ingresos fiscales para el gobierno japonés.
Japón, tercera economía mundial, prohibía hasta ahora los casinos. El Partido Liberal Democrático de Kishida defendió el proceso de aprobación, que dedicó años de esfuerzo a conseguirlo. En 2016, se aprobó una ley para legalizar la industria del juego, seguida de otra que permitía construir complejos turísticos integrados como el próximo complejo de Osaka.
Más de 20 empresas locales confirmaron que participarían como subcontratistas.
El gobierno de Osaka predijo que el proyecto generaría 15.000 puestos de trabajo y atraería hasta 20 millones de visitantes anuales, tanto de Japón como del extranjero. Se esperaba que los ingresos por ventas superaran los 520.000 millones de yenes, de los cuales el 80% procederían directamente de los casinos. Japón, conocido por sus jugadores ávidos, ya ha experimentado un aumento sustancial de los ingresos procedentes de las carreras y los salones de pachinko gestionados públicamente.